GiralPool – Mantenimiento y reparación de piscinas en Sevilla
Cambiar la arena del filtro de tu piscina es una tarea importante para mantener el agua limpia y cristalina. A continuación, te explicamos de manera sencilla cuándo, cómo y por qué deberías hacerlo. Este proceso es fundamental si quieres disfrutar de una piscina en perfectas condiciones y sin complicaciones.
La arena del filtro de tu piscina necesita cambiarse cada 3 a 5 años. Con el tiempo, la arena se desgasta y deja de filtrar el agua correctamente. Algunos signos de que es hora de cambiarla son:
Con el paso del tiempo, los granos de arena se desgastan y se vuelven más redondos. Cuando esto sucede, la arena ya no atrapa eficazmente la suciedad y los residuos del agua, lo que reduce la calidad de la filtración. Además, los residuos y aceites acumulados pueden obstruir el filtro y provocar zonas donde el agua pase sin limpiarse.
Apaga la bomba de la piscina: Antes de empezar, asegúrate de apagar la bomba para evitar problemas de presión.
Abrir el filtro: Quita la tapa del filtro para acceder al interior donde está la arena.
Retirar la arena vieja: Retira la arena vieja con una pala pequeña o una aspiradora. Hazlo con cuidado para no dañar las partes internas, como los tubos.
Limpia el interior del filtro: Aprovecha que el filtro está abierto para limpiarlo y comprobar que no haya daños en las partes internas.
Añadir la nueva arena: Llena el filtro con arena nueva. Generalmente, se usa arena de sílice de grano fino, pero asegúrate de comprobar el manual del filtro para conocer la cantidad exacta.
Retro-lavado (backwash): Después de montar de nuevo el filtro, realiza un ciclo de retro-lavado para eliminar las partículas sueltas de la nueva arena antes de poner en funcionamiento la piscina.
El cambio de la arena del filtro de tu piscina cada pocos años es clave para mantener la calidad del agua. Utilizar buenos materiales como arena de sílice o vidrio reciclado hará una gran diferencia en la calidad de filtración de tu piscina. ¿Necesitas ayuda?